
El club brasileño exige el pago de 2.6 millones de dólares debido al incumplimiento en la primera cuota del acuerdo.
Según trascendió, el “Rojo” abonó 400 mil dólares de los 750 mil pactados inicialmente, lo que generó el reclamo ante la FIFA por parte de Bragantino. La dirigencia de Independiente busca resolver la situación para evitar posibles sanciones deportivas o financieras.