
El juvenil surgido en Independiente recibió el llamado de la selección húngara y sueña en grande. A los 18 años, ya firmó su primer contrato profesional y se perfila como una de las grandes promesas del club.
Simón Bodnar hizo historia: se convirtió en el primer futbolista argentino en ser convocado a la selección de Hungría. El extremo de 18 años, nacido futbolísticamente en Independiente, fue citado por el combinado europeo y compartió sus sensaciones al mundo Rojo.
“Simigol”, como lo apodan en el semillero del Rojo, llegó al club con apenas siete años. Hizo todo el recorrido desde Infantiles, pasó por Inferiores, hoy es pieza clave en la Reserva, y ya fue llamado por Julio Vaccari para entrenar con la Primera en varias oportunidades. Hace pocas semanas, Independiente le firmó su primer contrato profesional, consolidando la apuesta por un jugador con gran proyección.
Bodnar arrancó su camino como volante, pero con el tiempo se reconvirtió en extremo ofensivo. Su capacidad para jugar por ambas bandas, gracias a que maneja bien los dos perfiles, lo hace muy versátil. Con 1,85 metros de altura, suma potencia física y presencia en el uno contra uno, pero además tiene técnica, desequilibrio y una pegada potente de media distancia.
La noticia de su citación a Hungría marca un hito no solo para su carrera, sino también para Independiente, que sigue formando talentos con proyección internacional.
La entrevista fue hecha por el medio partidario «Campanas Del Infierno».