
El equipo de Independiente cortó una racha negativa y mantiene viva la ilusión de clasificar.
La Reserva de Independiente logró un triunfo vital ante Deportivo Riestra por 2 a 1, en un encuentro que no solo significó cortar una racha de siete partidos sin victorias, sino también renovar las esperanzas del equipo en el torneo.
El conjunto juvenil del Rojo mostró actitud, compromiso y una mejora en el juego que lo llevó a sumar tres puntos fundamentales. Con esta victoria, el equipo se ilusiona con la posibilidad de clasificar, algo que parecía lejano semanas atrás.
Más allá del resultado, lo más valioso fue la reacción del equipo ante la adversidad. En un momento clave del campeonato, los dirigidos por Pedro Damián Monzón respondieron con carácter, demostrando que todavía hay margen para soñar.
Con esta inyección anímica, ahora se preparan para el próximo desafío con la mirada puesta en seguir escalando posiciones. El sueño del milagro sigue vivo.