
El Rojo aplastó 5-1 a Boston River en Uruguay por la Sudamericana y cortó una racha de 30 años sin convertir cinco goles en un partido internacional. El equipo de Vaccari recibió elogios por su gran nivel de juego.
Independiente tuvo una noche consagratoria en tierras uruguayas: goleó 5-1 a Boston River por la fase de grupos de la Copa Sudamericana y rompió una sequía de tres décadas sin convertir cinco goles en un encuentro internacional. La última vez había sido en 1995, cuando el Rojo venció 5-3 al Urawa Red Diamonds en Japón, durante una gira previa a la Recopa Sudamericana de ese año.
Con un planteo ambicioso, presión alta y sociedades que funcionaron a la perfección, los dirigidos por Julio Vaccari dominaron de principio a fin. El técnico, que empieza a dejar su huella en Avellaneda, fue destacado por hinchas y especialistas por la identidad ofensiva que le imprimió al equipo. Independiente volvió a ser protagonista en el plano continental y alimenta la ilusión de los suyos.